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“Estos son mis principios. Si no le gustan tengo otros” (Groucho) / Web que honra a un cómico fabuloso, el cual me enseñó a mirar la vida de un modo menos serio (valen2)

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viernes, 3 de marzo de 2017

PENE-VULVA

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La próxima vez que lo vea, recuérdeme no saludarlo (Groucho)


Ya se ha dicho todo en los medios de comunicación sobre el asunto: idea en contra de la transexualidad, campaña transfóbica ultracatólica, atentado contra los derechos de los niñ@s, defensa de la familia tradicional por un grupo ortodoxo...

Pero aquí me gustaría aportar mi granito de arena desde el punto de vista de un simple profesor de Lengua, porque aunque muchos estudiantes piensen que los análisis sintácticos no tienen sentido ni sirven para nada, he aquí que las cinco oraciones objeto de la polémica pueden aclararse gramaticalmente.

En primer lugar, yo no sé si el juez que ha vetado los mensajes de este autobús vergonzante se ha parado a analizar cada enunciado que lo compone para prohibir los tres últimos y permitir los dos primeros en forma interrogativa en su formato autocaravanero.

Me explico: ¿Es casualidad que las tres simples sean en blanco y las dos complejas en negro? ¿Pura estética? No lo creo, porque si profundizamos desde este orden sicológico o superficial, el que vemos y leemos, hasta el orden lógico y profundo, el que asimilamos inconscientemente, hallamos solo dos oraciones coordinadas (os pongo las palabras omitidas entre corchetes):

1. "Los niños tienen pene [y] las niñas tienen vulva, [por consiguiente] que no te engañen. 
2. Eres hombre si naces hombre [y] seguirás siendo [mujer] si eres mujer".

En definitiva: (1) La realidad física y su consecuencia reproductiva, y (2) La condición de género y su consecuencia discriminatoria.
Y, como siempre, sin darse cuenta, los ultracatólicos pecando de un machismo trasnochado al olvidar que la mujer también "nace" antes de "ser". ¿Rancia ética? 
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